En la actualidad las tarjetas de crédito se han transformado en una medio irremplazable para el consumo general: la masividad de uso que ha alcanzado la convierte en un medio de pago del que resulta complicado alejarse, sobre todo por la gran oferta de descuentos, beneficios y promociones de cuotas sin interés y recortes de precios que pueden verse en shoppings, supermercados y tiendas comerciales.
De acuerdo a una investigación llevada a cabo por el Centro de Investigación sobre Crédito y Consumo (CICyC) el 72% de los usuarios de tarjetas de crédito destaca la utilidad que tienen los descuentos en los supermercados como principal característica positiva.
Un dato importante a tener en cuenta es que más de la mitad de los usuarios de tarjetas de crédito se hallan en los segmentos medio-bajo (44%) y bajo (8%), por lo que el valor que se le da a los descuentos, promociones y cuotas es explicado. De ahí que muchos usuarios consideren que la tarjeta de crédito ha dejado de ser un complemento accesorio para convertirse en una necesidad: tan sólo el 3% de los consumidores argentinos estaría en condiciones de afrontar sus necesidades de consumo sin financiamiento a través de una tarjeta.
Actualmente, y sobre todo durante el último mundial de fútbol, se notó un fuerte impulso en las ofertas de cuotas sin intereses. Sin embargo, desde el CICyC afirman que ‘nadie regala nada’, ya que casi siempre se terminan pagando intereses que están implícitos en los precios de los productos, es decir, se remarca el precio de un producto incluyendo en el valor de lista los intereses vinculados a las cuotas ‘sin interés’.
Esta estrategia ha traído grandes resultados a las tiendas y a los bancos, ya que demostró ser una herramienta altamente funcional para poner en manos de los segmentos de menores ingresos la posibilidad de adquirir bienes que de otra forma serían inalcanzables.
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