Para pedir un crédito personal es imprescindible cumplir con los requisitos exigidos por el banco o entidad financiera que lo otorga. Sin embargo, antes de dar este paso es clave hacer un estudio de mercado y comparar los diferentes préstamos a nuestro alcance para así optar por la alternativa más conveniente.
Si bien pedir un crédito personal es un trámite simple y rápido, no hay que dejarse llevar por el impulso y la necesidad al momento de elegir un préstamo de estas características, ya que un mal paso en este sentido puede traducirse en una serie de deudas impagas que luego figurarán en el Veraz, dificultando el acceso a crédito a corto, mediano y largo plazo.
¿Qué tener en cuenta antes de pedir un crédito personal?
El primer paso antes de pedir un crédito personal es identificar cuál es el monto de dinero que necesitamos para así tomar un préstamo por el monto que vamos a utilizar y evitar solicitar fondos que luego quedarán inutilizados, pero que igualmente generarán intereses.
El segundo paso previo a pedir un crédito personal es conocer las alternativas disponibles: en este sentido hay que tener en cuenta qué bancos y entidades otorgan préstamos por los montos que necesitamos y, principalmente, conocer cuáles son los requisitos exigidos.
Esto último es clave al momento de pedir un crédito personal, especialmente para personas que se encuentran desocupadas o no están en condiciones de cumplir con las condiciones y requisitos exigidos. Frente a estos casos existen entidades financieras y prestamistas que otorgan créditos con requisitos mínimos, aunque lo hacen aplicando una tasa de interés mucho más elevada.
Comparar productos antes de pedir un crédito personal es, sin lugar a dudas, la fase más importante: conociendo aquellas opciones a las que tenemos acceso, debemos contrastarlas para sopesar cuál es el préstamo más conveniente.
¿Cómo comparar créditos personales? Es muy simple: una opción es utilizar los simuladores de crédito que permiten calcular la cuota del préstamo. Otra es comparar las tasas de interés de los diferentes productos. Sin embargo, la forma más efectiva de contrastar préstamos es a través del Costo Financiero Total (CFT).
El Costo Financiero Total es un valor que engloba no sólo la tasa de interés, sino también otros gastos asociados a la toma del préstamo, como es el caso de los gastos de evaluación y otorgamiento, gastos de mantenimiento de cuenta y seguro de vida, entre otros. De este modo, utilizando el CFT para comparar productos antes de pedir un crédito personal podremos conocer realmente qué producto es mejor.
Una vez que se ha seleccionado la entidad y el producto que se desea solicitar, llega el momento de pedir el crédito personal. Para ello existen diversas opciones, según las facilidades que otorgue la empresa prestamista: en muchos casos puede iniciarse el trámite por Internet o en forma telefónica, mientras que en otros sólo puede gestionarse en persona.