Los créditos hipotecarios son grandes préstamos de dinero con plazos de devolución de hasta 20 años por lo que, al momento de solicitarlos, se deben tener presentes todas las condiciones que puedan llegar a darse en materia económica.
Los créditos hipotecarios son grandes préstamos de dinero, con plazos de devolución de hasta 20 años por lo que, al momento de solicitarlos, se deben tener presentes todas las condiciones que puedan llegar a darse en materia económica.
Debido a que los créditos hipotecarios, en su calidad de préstamos altos y por eso largos en tiempos de devolución, están sujetos no solo a la estabilidad y situación económica y laboral individual de las personas que lo solicitan sino a la realidad y coyuntura económica del país, se deben tener en cuenta todos lo imprevistos posibles y, por sobre todo, saber aprovechar los momentos favorables para saldar la mayor cantidad de dinero adeudado.
En principio, si se solicita un crédito, se debe conocer el contexto inflacionario que se dará en un futuro cercano, para poder tomar la decisión correcta con respecto a las tasas de intereses (fijas o variables, porcentajes, etc.).
Además, no sería demasiado evaluar la situación laboral en la que se encuentra, sobretodo bajo la lupa del contexto de crisis mundial que se esta dando y que todavía no tiene fecha de finalización. Sería demasiado arriesgado embarcarse en un crédito hipotecario a 250 meses si no se posee una estabilidad y seguridad laboral adecuada.
Otro motivo por el cual tener en cuenta el contexto inflacionario, al momento de pedir un crédito hipotecario, es que los costos de construcción pueden variar rápidamente si el contexto inflacionario se dispara. Los préstamos hipotecarios son en pesos, por lo que es conveniente construir rápidamente apenas se adquiere el crédito para no correr mayores riesgos con respecto a aumentos de materiales e imprevistos.
Se debe tener muy presente que por lo general los créditos hipotecarios toman hasta el 40% de los ingresos de el/los solicitantes, por esto hay que considerar que no se dispondrá de una considerable cantidad de dinero y en casos de familias numerosas esto puede ser una complicación seria.
Las personas que se embarcan en un crédito hipotecario deben saber aprovechar los momentos económicos favorables y adelantar cuotas, de esta forma no solo se aminora la cantidad de años que el deudor tarda en reembolsar el dinero sino que el porcentaje de intereses se reduce significativamente y los riesgos se reducen. En el caso de no adelantar cuotas, el solicitante de un préstamo hipotecario, pueden estar reembolsando, al cabo de 20 años, hasta el 250% más del capital de crédito recibido.