Ya son más de 1.400 los emprendedores que han obtenido financiamiento a través de los créditos solidarios en la provincia de Neuquén a partir de un sistema financiero paralelo con garantías solidarias que funciona hace dos años. Este sistema virtual tiene una característica que lo hace único: no hay incobrables.
En este sistema participan la Nación, mediante la Comisión Nacional de Microcrédito, la provincia de Neuquén, por medio de la cartera de Desarrollo Social, y un total de 18 organizaciones no gubernamentales, entre las que se encuentran fundaciones, parroquias e incluso bibliotecas populares. De esta manera, a través de aportes otorgados por medio de las organizaciones se recaudaron $75.000 en el 2009 cada una, con la posibilidad de administrar los fondos de acuerdo a sus necesidades, contando con el apoyo del Estado en materia de logística y aporte técnico.
Así, los sectores más vulnerables de la provincia cuentan con una estructura a partir de la cual pueden acceder a dinero que luego devolverán con o sin intereses, según determinación de la entidad intermedia que administra el fondo. Otra de las ventajas es que los solicitantes cuentan con un programa de computación al que se accede a través de Internet y que funciona como un Veraz virtual, marcando día a día el pulso de la operatoria. De este modo se conocen los movimientos del emprendedor: si abona las cuotas, si solicita otros créditos, si fue a otra provincia, etc.
¿Cómo funcionan estos créditos solidarios?
En primera instancia se organizan grupos pequeños con personas que se conozcan entre sí. Posteriormente se realizan diferentes reuniones en diversos domicilios para así poder confirmar realmente las intenciones de ese solicitante para con el dinero exigido. El sistema funciona a partir del pago individual, pero en el caso de que uno de los solicitantes no pague, el crédito será devuelto por el grupo que ofreció su garantía solidaria.
En esta estructura, además de participar el Copade y la cartera de Desarrollo Social, forman parte la legislatura y la Red de Bancos Populares. De esta manera se posibilita el acceso a créditos por parte de personas que no pueden obtener financiamiento dentro del sistema financiero tradicional.