Créditos. Cuales son los sistemas de financiación y sus características

Los créditos ofrecidos por las entidades crediticias, ya sean bancos o empresas, pueden adoptar dos tipos de sistemas de financiación que definirán la relación entre el monto y el interés.

La financiación de los créditos puede estar ordenada bajo el sistema francés o el sistema alemán de financiación, los cuales suponen cada uno una diferente relación entre el capital y los intereses en las cuotas que se pagan. Aún así cualquiera de los dos sistemas supone el cobro de intereses sobre el saldo del capital adeudado.

El sistema francés de financiación del crédito, según indicaciones del Banco Central de la República Argentina, consiste en que el capital más los intereses que se cobran en las cuotas no son, al comienzo del crédito se paga una mayor cantidad de intereses que de capital crediticio y esta situación se invierte a medida que avanzan las cuotas. La cantidad de dinero a pagar en cada cupo será siempre la misma si se toma un préstamo a tasa fija y variará según los disponga el banco si la tasa es variable.

En cambio, en el sistema alemán de financiación, se afronta un mayor pago de capital y un menor monto de intereses por cuota al comienzo, por lo que la cantidad de dinero de las cuotas se va reduciendo a medida que se salda el préstamo.

Los bancos que ofrecen líneas de crédito en Argentina por lo general ofrecen el sistema francés de amortización con disposición de tasa fija o variable según prefiera el cliente; de cualquier modo, también existen ofertas, aunque menores, de financiación bajo el sistema alemán.

Especialistas determinan la utilidad de uno u otro tipo de sistema para financiar créditos según la finalidad que vaya a tener y las previsiones de ingresos de quien lo solicite. Por ejemplo, desde la página del portal del cliente del BCRA, se recomienda optar por el sistema alemán en caso de que los ingresos del cliente vayan a ser estables, porque el monto a pagar se reducirá con el tiempo y se dispondrá de mayor dinero libre; en cambio, se recomienda el sistema francés en caso de que el beneficiario de un crédito proyecte un aumento de sus ingresos en el tiempo, en este caso las cuotas siempre serán iguales pero el dinero disponible irá en aumento.