A lo largo de los últimos años se ha visto un importante crecimiento en la demanda de créditos personales: esta tendencia se mantiene actualmente y los especialistas aseguran que no presentará modificaciones a corto y mediano plazo, a pesar de que las tasas de interés no son las más convenientes.
Lo cierto es que a pesar de que las publicidades de instituciones que brindan servicios financieros presentan créditos más que convenientes, al momento de leer la letra chica y sacar números finales se puede percibir claramente que los porcentajes que termina pagando el solicitante del crédito son más bien caros.
Hoy por hoy los préstamos personales otorgados por los bancos tienen un costo financiero total que oscila entre el 34 y 45% anual, claro que las cifras finales estarán sujetas a numerosas variables, incluyendo los ingresos del cliente, sus antecedentes financieros, si tiene cuenta en la firma y las cuotas en las que prevé pagar su deuda.
Para ilustrar un poco cómo cierran los números a la hora de obtener un crédito personal de este tipo presentamos un ejemplo: un individuo que accede a un crédito de $20.000 a pagar en 60 cuotas, con un costo financiero total de 39,7%, pagará mensualmente una cuota de $698,58. Al finalizar sus pagos habrá devuelto un total de $41.880, casi un 210% del valor del préstamo, según informa Diario UNO.
Para este ejemplo se han tomado en cuenta las condiciones del Banco Nación, sin embargo existen otras alternativas: algunas mejores y otras peores, dependiendo de las características del solicitante y sus condiciones.
Por supuesto una persona tiene la posibilidad de solicitar un crédito a través de las entidades financieras que brindan este tipo de servicios por fuera del sistema bancario. En algunos casos los requisitos son similares, mientras que en otros las condiciones son claramente más flexibles. La realidad indica que la diferencia se presenta principalmente cuando comparamos tasas de interés: un crédito de $15.000 a pagar en 36 meses tiene una cuota de $1.190, lo que significa que al finalizar los pagos el solicitante terminará pagando un total de $42.840.
Es de imaginar que muchos solicitantes de este tipo de créditos a tasa fija en pesos tienen la mira puesta en la inflación, que con el paso del tiempo irá licuando la deuda, por lo que en esos casos podrían resultar alternativas de financiamiento más que convenientes.